NIN y BRMC en Buenos Aires

Llegaron los tres en perfecto silencio, (muy) poca luz se filtra por las esquinas y solo alcanzo a notar sus siluetas. Tomaron sus posiciones, uno enfrente del otro, haciendo un triangulo semiabierto y meditaron un poco antes de romper el tiempo con las vibraciones mas impredecibles de este lado del universo, todo es transormformado en palpitar sónico por los maestros, estos vínculos entre nosotros y la oscuridad iluminadora de la... Desperté un poco agitado y con un raro estado de animo, en esta gran ciudad (nueva para mi, vieja el mundo). Fuí inmediatamente al baño y despues de lavarme la cara, distingo que lo mas prudente será calentar un poco agua para el té mañanero, digno de un día sin clases soleado y fresco.

Rafa, el norteño loco, ya estaba pedo para entonces y daba indicios de agitación prematura para este día... nos sentamos en la sala con los computadores abiertos y ahí mismo, sin la mas mínima incitación, se sacude un poco de la caspa del diablo sobre la mesa.

-Ahí 'sta cabrón (dice sin voltear a verme, mientras pica con una tarjeta el volatil polvo) y chingatela rápido que llega el Fer y se pone pendejo.

-Ya no me estes ch...- Inhalé poco a poco la gorda línea blanca mientras pensaba porque no me latía el perico y sin darme cuenta ya llevabamos 3 estelas, un par de rayas mas y armabamos el (gordo) porro para irnos a ver el recital (acá le dicen así a los toquines) de las uñas de nueve pulgadas de don Trent Reznor, los Natas (lease alrevés) y Black Rebel Motorcycle Club con el buen Inspector, que pasó por mí con un par de boletos que adquirimos en las mas afortunadas circunstancias...

Llegamos caminando al estadio del River después de salir despegando del hostal, volamos sin prisas para ver a Black Rebel Motorcycle Club que empezaba su set justo para cuando entramos, después del fluído acceso al estadio. Ví por ahí muchas botas negras y altas, caras sin afeitar y chavas con onda entre la banda y me parece que no está mal, nada mal. Y ahí están, enfundados en cuero negro (no hacía frío) y con su distorsión cruda me hicieron mover la (ausente) mata... pinche rock con feeling y sin artificios apantalladores. Tocaron dos o tres rolitas del Howl y lo demas fué feedback, coros exactos, riffs ponedores... por ahí no faltó quien opinara que a la bataca le faltara contundencia...naa, pinche argentino mamador (jejeje).

Terminaron con "Whatever happened to my rock n' roll", autentico himno rocanrolero interpretado a la perfección y para el momento en que concluyeron, en perfecta sincronía, empezaron en el escenario trasero, a sonar algunas citaras psicotrópicas mientras una manta anunciaba a los Natas, quienes soltaron una tsunami de rock stoner-lisérgico a la concurrencia que esperaba impacientemente a NIN.

Me gustaron aunque un par de rolas me dieron flojera, y eso que me clavo en la textura, en fín... terminaron y pusieron de nuevo la música hindú distorsionada para augurar el comienzo del fin de esta noche sin estrellas.

NIN estuvo increíble, el maestro Trent (sos grosso Trent, sos grosso) y su bandota, abusaron del increíble sistema de sonido* del escenario principal para mandarnos al carajo de ida y vuelta... Escuchar a un par de generaciónes corear "I wanna' fuck you like an animal, I wanna' feel you from the inside..." y perder la cabeza en la mas anarquista distorsión y ruido, me hizo recobrar esperanzas en este mundo que se ha saturado de humanos.

*¿Porqué no le subieron a ese volumen al Club de Motociclistas Rebeldes de Negro?

Pensé por momentos, mientras admiraba del despliegue escénico mas intenso de mi vida, en aquellos con quienes me hubiese gustado compartir la experiencia, aunque bueno, ahí estaba el inspector compartiendo la buena onda y minimizando la nostalgia. Se les extraña (poco, no se inflen ;)